lunes, 6 de febrero de 2012

Calor de hogar...

Tigri es un gatito bastante tímido y asustadizo pero ya poco a poco se va acostumbrando a las luces del flash
Tengo mi querido blog un tanto abandonado. Este 2012 ha comenzado con muchos frentes abiertos y todavía no he encontrado ni la inspiración ni la energía para contar cosas. Mi mundo personal y el profesional siguen entrelazándose de tal modo que al final, y aunque me empeñe en lo contrario porque es lo que dicen los libros, la conclusión es que en mi caso, ambos mundos son en realidad uno solo. Y así, mi casa es también, cada día más, mi espacio profesional.

Y esa reflexión es la que me ha llevado a dar un paso que hacía tiempo venía meditando. Si la mayor parte de mi trabajo lo hago en casa ¿por qué no traer a mis modelos a mi espacio?  La semana pasada una solicitud muy especial me dio el empujoncito que necesitaba para montar un pequeño estudio en casa. La pena es que son unas fotos para uso particular que mi modelo no desea compartir con el resto del mundo...pero la experiencia me ayudó a ver que en la mayor parte de las ocasiones no será necesario encarecer mis servicios alquilando un espacio.

Hoy mi gatito Tigri y mi hija Ana me han ayudado a probar algunas cosas y a organizarlo todo para que las fotografías de estudio dejen de ser algo excepcional y pasen a ser una más de las opciones de Merirous.
Fuera hacía mucho frío y nosotros, calentitos, trabajamos en conseguir hacer de nuestra sala que ya hace tiempo es también mi oficina, un estudio donde conseguir esos retratos que tanto me gustan.

A sus 14 años Ana es ya una muy buena fotógrafa. Su visión de las cosas me ayuda mucho

No hay comentarios:

Publicar un comentario